Arboleda de los sueños
cuantos albergaremos,
eséncias de nosotros
y deseos de aquellos.
Rito de immundície,
grito de Abdul Jabbar,
teñido todo su canto
pronto ya descansarán.
Interludio de mareas
incompletas ahogarán
mil canciones sin rienda
que por olvidar terminarán
Y dijo el alquimista:
"Viviré cerca de un rio,
allá donde no llegue la mar''
todo por vacío no llegar.
Y silbaron las nubes
que transitan al flotar
engendros polimorfos
que contaminados estarán.
Luego los ecos del hombre
engullir querrán
que esos cuneiforme
a sus piés renegarán.
Pués la luz en su eséncia
innundará la salada mar
de sueños decaídos
de la arboleda de un hospital.
Y preguntose el amigo
''¿Qué mal generarán?"
el que la pura eséncia
mas complicada se volverá.