Para empezar quiero hacer una breve pero contundente afirmación: Las personas tenemos auras, eso es cierto pues aunque no lo creas te voy a explicar porqué. Como ser viviente en la realidad, en como persona en el sueño de vivir, cuando vemos a alguien con su mera expresión aparente, con su forma, sea descuidado en algo, aparentemente triste o feliz, podemos en nuestra mente categorizar todos estas imágenes que nos denotan lo que yo llamo patrones canónicos o expresiones sacras, y nosotros con ver su reflejo intuimos que demuestran en base al conocimiento adquirido un símbolo de un adjetivo, unos porqués conjugados en su imagen de reflejarse (la magia estudia las imágenes simbólicas y su uso), en resumen, con ver una persona tu la juzgas y sacas tu patrón de interacción con ella, sea cual sea. Ahora tenemos claro que las personas son entes que expresan símbolos con adjetivos en representación de un yo idealizado por ella, pero vamos a profundizar más aún, la representación de las personas depende de el color que representen, eso sí, relacionado a con la frecuencia lumínica que tengan, cuán avanzados en su misión en la realidad estén, y esto lo podemos ver reflejado en las túnicas de los que creen en la espiritualidad, por ejemplo los budistas o los altos cleros.
Aparte de la simbología cromática también tenemos la simbología conceptual, que son las imágenes de palabras que nos vienen a la mente, siendo estas colores conjugados simbólicamente por el inconsciente-consciente, la mente. Podemos ver simbología conceptual en todos lados, artes pictóricas, esloganes, música, banderas, en todos lados. Aquí os dejo un símbolo muy común pero muy desconocido, el símbolo de la medicina:
También nos hipnotizamos inconscientemente por los números, que significan en nuestra cabeza, en nuestro inconsciente. Para cuantas personas pensamos, cual es nuestro número favorito, con cuantas personas estamos no sentimos amenaza en nuestra burbuja de confort, el número de parejas, los números de la semana, nuestro cálculo mental, cuanto cuesta algo, cuanto tiempo necesitamos para algo, la configuración del abecedario, las posibilidades que tenemos, los días de la semana, los meses, los años, la edad, las notas musicales, la frecuencia de color... Como ya veis hay tantas cosas que nos configuran numéricamente que es complicado tener una ciencia exacta que nos describa como personas pues nuestro avatar es muy complejo, mucho cálculo, aunque hay gente que lo estudia obviamente, como psiquiatras, psicólogos, pedagogos, magos, alquimistas, gente que hace propaganda, artistas, todo para encontrar el código numérico melódico que más vibración nos genera, que más se nos queda en la cabeza.
La configuración alfa-numérica la he llamado así porque alfa significa primero, es decir prioridad y numérica porque persigue unos números que se repiten, siendo melódicos o de pasos para representar un patrón. Seguimos a la alfa porque es el primero, el que nos da seguridad porque nos ha enseñado como es, lo que nos hace impresión.
Así que ahora ya sabéis como funciona un poco más la realidad, podéis creerlo o no, yo ya he dado mi palabra, las bases de una investigación para no vivir tanto en la ceguera metafórica.