Y quien es Diós, a mi parecer es nuestra voluntad, hacia donde nos lleva el instinto animal primario, la cordura nos lo limita, pero necesitamos limitaciones, al menos hasta que lleguemos al punto de la no hipocresía, y para eso necesitamos conocimiento y raciocinio como tradición basal (en la que basarte).
Porque los locos son meras etiquetas de personas incomprendidas por una sociedad seria, dónde quien no cumple los requisitos para subsistir en ella, el poder ''divino'' de la comunidad los anula para así no tener interyeccione(leccciones a nivel basal de raciocinio y de paso del tiempo). Pobres genios impartidos por meros artilugios que ni nos deja mirar nuestro apéndice, dónde ya pasó a órgano vestigial.
Mejor poetizar la locura que llevar un vientre de cuna.
Al menos para ser prácticos en el sistema, triste humildad, en la que encontramos los locos el lugar, burbuja caliente, que penetra nuestra mente, y nos yace lentamente, con estelas azuladas de derechas, pero teme la ambivalencia, de cosas aparentemente inertes y necias.
Para que negar el vicio del hogar si por natural ya solo llevamos el mal, la transformación, y la extremaunción de pasiones pasadas por un cordón. Mera hipocresía de un sistema de hipócritas.