No tendría grácia si no tubiesemos un universo prefijado por el tiempo, el espacio y la materia, llámalo X o universo. Quien lo controle sabe mucho, pero en nuestro caso de humanos es algo complicado aunque nuestra ambición nos haga mudos y meras bacterias en una tierra donde andan fantasmas de luz y masas de infinidad de tamaño.
Por eso tenemos a la que yo llamaré Dora la abrepuertas ( la abre dórias). Ella, mitificada es la abrepuertas inocente, y su manutención es cautelar debido a que todos anhelamos una libertad de instinto basada en creencias y en fe en nosferatus (captaciones de miedo en una situación) y aparentar tranquilidad, Dora es inocente y no cree en mas de lo que ha visto, por eso no teme a nada. Para ello utilizamos instintivamente el ''ritual tutelario'' del que no comprendemos pero sentimos amor, el Tales (tal es de esta manera) y adoptamos un rol para gobernarla por propia voluntad porque tenemos miedo a que se lastime. El ritual del reflejo de los confundidos está anclado al amor y totalmente condicionado a él y por ello tenemos memória. Tenemos a mi parecer la memoria y la antimemoria, para adoptar la forma que queramos en nuestra esfera de Ki (rol) quantroniana de chakras raquídeos (colores emotivos - emociones) más el perfume de chacal que llevemos incluido como instinto básico(sentimientos) .
Antimemoria: trauma no superado, situación que implica un peligro real al perforar (tocar auralmente) y vislumbrar su parte de luz, ya que todo en sí fue una enseñanza del destino.
KI : Paciencia y progresión hacia el respeto mutuo segun un samurai con la pikka dikkeia i el código samurai-Khazar.
La gracia está en la causalidad inocente e inocua de la cosa más graciosa que encontremos en el momento de ''antes de morir''(pre mortem), y aquí es donde cada uno elige más un rol dedicado al espacio, al tiempo o a la materia, o sino al nexo que es la inteligencia de compartir sin pedir, mas bien preguntar, allí en la respuesta se hallará el amor.