- Las emociones enquistadas son las guías al tener un sentimiento en una situación concreta, pues se trata de la rememoración de una o más situaciones conocidas en el subconsciente y tal vez en el consciente, que utilizamos para tener una base de posibles interacciones que tal vez puedan ocurrir.
- Por otra parte tenemos el deber del respeto y el honor. Esto sería la creación de la moral de toda nuestra vida en sí, pues marcaría los límites de nuestra actuación debido a motivos previamente estudiados con detenimiento, y las capacidades que debemos tener en cuenta a la hora de afrontar una situación. Se trataría de un conjunto de leyes y normas auto-impuestas que nos hemos creado durante nuestra existencia a modo de escudo para la razón y lo sin-motivo.
- También tenemos del deseo, aquello que queremos conscientemente y queremos conseguir paralelamente de nuestras necesidades vitales. Se trataría de una creación del ego y de la posibilidad de conseguirla por ''derecho divino''.
- Por último tenemos los miedos, que decir de ellos pues todos los conocemos. Se podría decir que ellos controlan los límites de la actuación y también nos generan situaciones probables en nuestra máquina de pensar caracterizadas por dichos, que a veces, sin tenerlos, nos parecerían inútiles o desconocidas. El valor de contraposición al miedo se llama cordura.
''El entendimiento es una tabla lisa en la cual no hay nada escrito.''
Aristóteles